Se ha destacado en diversas ocasiones la importancia que los libertarios españoles otorgaron a la cultura y la educación como instrumentos indispensables de su proyecto emancipador y de transformación social. Este libro es un análisis no tanto las declaraciones programáticas o de intenciones, las opiniones 'oficiales' o las grandes líneas del discurso ácrata en torno a estos temas, como de las características y el contenido de las prácticas culturales concretas desplegadas por los anarquistas y anarcosindicalistas valencianos durante los años de la Segunda República y la Guerra Civil (1931-1939), especialmente en sus perfiles más reales y cotidianos. Éstas, lejos de tener una importancia secundaria, resultaban, por el contrario, claves para la socialización y la formación de aquéllos. Aseguraban la cohesión del grupo, consolidaban los sentimientos de pertenencia a un movimiento social (sin duda heterogéneo) y, en definitiva, desempeñaban un rol esencial en el proceso de conformación de la identidad libertaria. Conferencias, debates, cursillos, escuelas diurnas y nocturnas, lecturas, bibliotecas, periódicos y revistas, libros y folletos, veladas artísticas, excursiones campestres o actividades como el naturismo, el nudismo o el aprendizaje del esperanto, entre otras, eran prácticas a través de las cuales se construía el 'individuo' anarquista y se modelaba un tipo de vida y cultura militantes, así como una forma de entender la sociabilidad y el ocio populares. Asimismo, participaban de todo un programa general de superación individual y colectiva, mediante la extensión de la cultura y la educación, que no resultaba del todo ajeno en sus formas y propósitos al puesto en marcha por otras culturas políticas del momento situadas también en el ámbito de la izquierda, como es el caso, por ejemplo, del republicanismo o el socialismo.
By her own account, Peggy O'Neale Timberlake was “frivolous, wayward, [and] passionate.” While still married to a naval oflicer away on duty ...
... had married the widowed daughter of a Washington tavern keeper. By her own account, Peggy O'Neale Timberlake was “frivolous, wayward, [and] passionate.
... Bill, Kennedy, Jacqueline, Kennedy, John F., Kidd, Albert and Elizabeth, Kieran Timberlake (architects), Kilpatrick, John, Kirkland, William, Kissinger, ...
... 195–196, 361; abolishing of, 257 Ticonderoga fort, 157, 169 Tilden, Samuel J., 524 Timberlake, Peggy O'Neale, 301 Timbuktu, Mali, Sankore Mosque in, ...
By her own account, Peggy O'Neale Timberlake was “frivolous, wayward, [and] passionate.” While still married to a naval officer away on duty, ...
Timberlake, p. 8 (9–10). 2. Timberlake, p. 36 (70). 3. Hoig, p. 45; Kelly, p. 22; Timberlake, p. 37 (72–73). 4. Alderman, p. 6; Timberlake, p.
Timberlake, S. 2002. 'Ancient prospection for metals and modern prospection for ancient mines: the evidence for Bronze Age mining within the British Isles', ...
hadn't known Timberlake until the two moved in together. Kathy had worked at a series of jobs, including electronics assembler and a dancer in a bar, ...
Terrill, Philip, killed Thompson, William S. Timberlake, George, wounded. Timberlake, Harry. Timberlake, J. H., wounded. Timberlake, J. L., wounded.
As the caretaker of the clubhouse, Timberlake was furnished living quarters on the second floor. Around 8:00 p.m., he descended into the basement for the ...