Tres procesos paralelos enlazan a Cali con Nueva York desde los años setenta hasta el final del siglo XX, en un vínculo de ida y vuelta que el autor llama la conexión latina. Primero, la industria discográfica —y del espectáculo— de la salsa, liderada por la compañia Fania desde 1964 en Nueva York, que tendrá en Cali uno de sus mercados más importantes en Latinoamérica. Segundo, la industria de la cocaína, producida en Cali a partir de los años setenta (además de Medellín), que tendrá en Nueva York su principal mercado en el mundo, como centro de consumo y distribución para otras ciudades norteamericanas. Tercero, la migración de colombianos, entre ellos miles de caleños y vallecaucanos que viajaron a la Gran Manzana en la misma época. Durante las décadas siguientes, muchos inmigrantes, legales e indocumentados, terminaron en las redes de comercialización y distribución de la droga en Estados Unidos, dedicados por completo al gran negocio, o bien, combinando actividades ilícitas y trabajos formales, aspirando al estilo de vida americano y anhelando regresar a su país. La convergencia de los tres procesos y sus múltiples entrelazamientos —condensados en la ecuación salsa/narcotráfico/drogadicción— tuvieron un gran impacto social, simbólico y cultural en Santiago de Cali. Es la tesis desplegada en este libro, basado en los hallazgos de la indagación etnográfica, en los estudios alusivos al tema y en las historias de vida recaudadas con diferentes inmigrantes. La etnografía en caliente, la memoria herida y la cultura traketa, son algunas de las apuestas conceptuales que el autor arriesga en este estudio antropológico, para comprender una faceta diferente del narcotráfico, mediada por la música salsa. El trabajo de campo y la apelación a la memoria de los protagonistas entrevistados se complementa con la consulta en archivos periodísticos, sonoros y audiovisuales, fotografías, grafismos y otros documentos, incluida la música misma, para lograr este acercamiento al lado oscuro de la cultura salsera, su cara oculta y transgresora, configurada en la doble vía de la conexión latina durante el último cuarto del siglo XX.
By her own account, Peggy O'Neale Timberlake was “frivolous, wayward, [and] passionate.” While still married to a naval oflicer away on duty ...
... had married the widowed daughter of a Washington tavern keeper. By her own account, Peggy O'Neale Timberlake was “frivolous, wayward, [and] passionate.
... Bill, Kennedy, Jacqueline, Kennedy, John F., Kidd, Albert and Elizabeth, Kieran Timberlake (architects), Kilpatrick, John, Kirkland, William, Kissinger, ...
... 195–196, 361; abolishing of, 257 Ticonderoga fort, 157, 169 Tilden, Samuel J., 524 Timberlake, Peggy O'Neale, 301 Timbuktu, Mali, Sankore Mosque in, ...
By her own account, Peggy O'Neale Timberlake was “frivolous, wayward, [and] passionate.” While still married to a naval officer away on duty, ...
Timberlake, p. 8 (9–10). 2. Timberlake, p. 36 (70). 3. Hoig, p. 45; Kelly, p. 22; Timberlake, p. 37 (72–73). 4. Alderman, p. 6; Timberlake, p.
Timberlake, S. 2002. 'Ancient prospection for metals and modern prospection for ancient mines: the evidence for Bronze Age mining within the British Isles', ...
hadn't known Timberlake until the two moved in together. Kathy had worked at a series of jobs, including electronics assembler and a dancer in a bar, ...
Terrill, Philip, killed Thompson, William S. Timberlake, George, wounded. Timberlake, Harry. Timberlake, J. H., wounded. Timberlake, J. L., wounded.
As the caretaker of the clubhouse, Timberlake was furnished living quarters on the second floor. Around 8:00 p.m., he descended into the basement for the ...